NIÑOS HEROES

Poco se imaginaban los seis jóvenes cadetes del Colegio Militar de México que, con su acto de defensa patriótica frente a las tropas invasoras estadounidenses, iban a convertir un cerro rocoso y volcánico, que era ya conocido antes de la llegada de los españoles con el nombre de Chapultepec. MORIR POR LA ENSEÑA PATRIA Los seis cadetes, que con la guarnición de la Academia tuvieron en jaque durante dos días a ejército estadounidense y que perecieron en la trágica batalla, fueron Juan de la Barrera, que vio la luz en Ciudad de México en el año 1828; Juan Escutia, nacido en Tepic, antiguo cantón de Jalisco, hoy Nayarit, en una fecha situada entre los 1828 y 1832; Francisco Márquez, natural de Guadalajara, en el Estado de Jalisco, nacido en 1834; Agustín de Melgar, natural de Chihuahua, en el Edo. Homónimo, del cual se desconoce también la fecha exacta de su nacimiento, probablemente entre los años 1828 y 1832; Fernando Montes de Oca, nacido así mismo entre los años 1828 y 1832 en Azcapotzalco, D.F.; Vicente Suárez Ferrer, el más joven de todos ellos, que vino al mundo en Puebla el año 1833. Si bien hasta el momento se había atribuido erróneamente a Juan Escutia el acto heroico de haberse envuelto en una bandera mexicana y lanzado al vacío desde la azotea del castillo, con el objeto de que en la actualidad todo parece indicar que el autor que este sublime acto patriótico fue Fernando Montes de Oca. En la actualidad, sus restos descansan desde 1952 en el Monumento a los Niños Héroes, erigido en su memoria y situado al pie del cerro de Chapultepec.