El premio Nobel es otorgado a aquellas personas que han hecho investigaciones que hayan resultado sobresalientes, ya sea inventando técnicas o equipos revolucionarios o bien que hayan hecho contribuciones a la sociedad. En razón de la última voluntad de Alfred Nobel, un inventor sueco creador de la dinamita, firmó su testamento en París el 27 de Noviembre de 1895. Tres mexicanos han sido distinguidos con este premio, el primero de ellos es Alfonso García Robles. Nacido en Zamora Michoacán el 20 de marzo de 1911, fue diplomático mexicano y premiado en 1982 con el premio Nobel de la Paz conjuntamente con Alva Myrdal. Siendo egresado de la Facultad de Derecho de la Universidad Autónoma de México, tiene Entre sus libros y artículos más sobresalientes: La desnuclearización de América Latina, el tratado de Tlatelolco Génesis, alcance y propósito de la proscripción de armas nucleares en América latina (1967), tratado para la prohibición de armas nucleares en América latina. Mario José Molina Henríquez. Nacido en la Ciudad de México en 1943, realizó su formación profesional como Ingeniero Químico, estudió un posgrado en Alemania donde investigó durante dos años la cinética de polimerizaciones entre otros muchos estudios. Realizó diversas investigaciones en el ámbito de la química ambiental y sobre este tema decidió no limitarse únicamente a las publicaciones científicas y utilizó otros medios para animar al público a enterarse de sus descubrimientos e influir en las políticas públicas para detener el cambio climático. Es considerado como de los primeros científicos en alertar sobre el peligro de los clorofluorocarbonos utilizados en aerosoles tanto industriales como caseros. Recibe el premio Nobel de Química en 1995 por sus trabajos de la química de la atmósfera.
Octavio Paz Lozano nació en la Ciudad de México el 31 de marzo de 1914 fue un poeta, escritor, ensayista y diplomático mexicano, premio Nobel de Literatura (1990). Es considerado uno de los más grandes escritores del siglo XX y uno de los grandes poetas hispanos de todos los tiempos.
Octavio Paz Lozano nació, en medio de la Revolución mexicana. Criado en Mixcóac, una población cercana (y que ahora forma parte de la Ciudad de México) por su madre, Josefina Lozano, , así como por una tía y su abuelo paterno, Ireneo Paz, un soldado retirado de las fuerzas de Porfirio Díaz, intelectual liberal y novelista. En 1950, escribe y publica El laberinto de la soledad, un innovador estudio antropológico de los pensamientos y la identidad Mexicana. En el año de 1968 fungia como embajador en la India, cuando tuvo lugar la masacre de Tlatelolco el 2 de octubre, al enterarse de estos hechos renunció como embajador en señal de protesta por estos lamentables hechos, mismos que empañaron la celebración de los juegos olimpicos.
Muere el 19 de Abril de 1998 a los 84 años de edad en la Ciudad de México
Nació en la ciudad de México. Estudió en la Facultad de Leyes y en la de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional. Su primer libro, Luna silvestre, fue editado en 1933. En 1936 se trasladó a España para combatir en el bando republicano en la guerra civil, y participó en la Alianza de Intelectuales Antifascistas. Al regresar a México hizo amistad con los poetas del grupo de los Contemporáneos y fue uno de los fundadores de la revista Taller (1938). Amplió sus estudios en Estados Unidos en 1944-1945, y concluida la Segunda Guerra Mundial, recibió una beca de la fundación Guggenheim, para, más tarde, ingresar en el Servicio Exterior mexicano.
En los años cincuenta publica Libertad bajo palabra, y le siguen El laberinto de la soledad, Semillas para un himno y la obra de teatro La hija de Rappaccini, ambas de 1954.
Ingresó en El Colegio Nacional el 1 de agosto de 1967.
Cerró su actividad diplomática en 1968, cuando renunció como protesta contra la política del gobierno mexicano ante el movimiento democrático estudiantil.
En 1974 publica Los hijos del limo, El mono gramático y Versiones y diversiones. En 1975 publica Pasado en claro, Poemas y El ogro filantrópico (1979). A los años 1982-1990 corresponden Sombras de obras, Hombres en su siglo, Sor Juana Inés de la Cruz o Las trampas de la fe entre otros.
Fue director de la revista Plural y, después, fundador y director, hasta su muerte, de la revista Vuelta. Obtuvo numerosos premios y distinciones, entre ellos el Premio Cervantes (España), el Premio Ollin Yolitztli (México) y el Premio T. S. Eliot (EUA).
Fue el primer poeta e intelectual mexicano que ha sido distinguido con el Premio Nobel de Literatura (1990). En ese mismo año organiza una mesa redonda con intelectuales de todo el mundo, que se transmitió por la televisión privada y que tuvo diversas repercusiones: Encuentro de Vuelta, el siglo XX: la experiencia de la libertad.
Poeta, narrador, ensayista, traductor, editor y gran impulsor de las letras mexicanas, Paz se mantuvo siempre en el centro de la discusión artística, política y social del país. Su poesía se adentró en los terrenos del erotismo, la experimentación formal y la reflexión sobre el destino del hombre.
Octavio Paz falleció el 19 de abril de 1998 en la Ciudad de MNació en la ciudad de México. Estudió en la Facultad de Leyes y en la de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional. Su primer libro, Luna silvestre, fue editado en 1933. En 1936 se trasladó a España para combatir en el bando republicano en la guerra civil, y participó en la Alianza de Intelectuales Antifascistas. Al regresar a México hizo amistad con los poetas del grupo de los Contemporáneos y fue uno de los fundadores de la revista Taller (1938). Amplió sus estudios en Estados Unidos en 1944-1945, y concluida la Segunda Guerra Mundial, recibió una beca de la fundación Guggenheim, para, más tarde, ingresar en el Servicio Exterior mexicano. En los años cincuenta publica Libertad bajo palabra, y le siguen El laberinto de la soledad, Semillas para un himno y la obra de teatro La hija de Rappaccini, ambas de 1954. En ese mismo año organiza una mesa redonda con intelectuales de todo el mundo, que se transmitió por la televisión privada y que tuvo diversas repercusiones: Encuentro de Vuelta, el siglo XX: la experiencia de la libertad. Poeta, narrador, ensayista, traductor, editor y gran impulsor de las letras mexicanas, Paz se mantuvo siempre en el centro de la discusión artística, política y social del país. Su poesía se adentró en los terrenos del erotismo, la experimentación formal y la reflexión sobre el destino del hombre. Octavio Paz falleció el 19 de abril de 1998 en la Ciudad de México éxico
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MARIO JOSE MOLINA HENRIQUEZ
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