Para el Padre Gregorio López, la violencia que se registra en la zona es muy “grave e indignante” al vivir cientos de familias en una constante sicosis y temor, por el modo de operar de los criminales.
La realidad de este municipio y de toda la zona de Tierra Caliente no es desconocida para él, se ha visto obligado a vestir un chaleco antibalas durante la homilía y a aceptar ser cuidado por guardaespaldas, ante las amenazas que el crimen organizado ha hecho en su contra, al decidir enfrentar a los delincuentes.
Padre Gregorio López |
Lo anterior se sustenta en las declaraciones que ha hecho el Padre ante los medios de comunicación:
“Aquí ya sé cómo masca la iguana, cómo corre el agua, sabemos cómo está todo. Tenemos la fuente de la gente. Sabemos cuántos muertos y secuestros hay. Cuántos ranchos han robado, qué ministerios públicos, notarios y policías están con ellos. Sabemos la corrupción que hay en la Presidencia Municipal”. Él hace referencia a los Grupos Antagónicos del Crimen Organizado, mejor conocidos como los "Caballeros Templarios" que existían en la Región de Tierra Caliente, en especifico en Apatzingán.